Palo

Tan sólo dos comentarios sobre la foto:
1) ¿Cómo un árbol tan pequeño puede causar tanto daño?
2) Ahora sí que no te lo compra nadie.

Pensaba...

"Fracaso" es una palabra fuerte...

Cuidado con David

Hace algunos años hurgando entre las descargas de música en mi computadora, encontré un tema de un cierto dibujo animado llamado "David, el gnomo". Supo proveerme muchas ocasiones de risa, y cada persona a la que se la pasaba, descubría un nuevo significado turbio en la letra. Acá les dejo unos fragmentos:

Soy un gnomo,
y aquí en el bosque soy feliz
bajo un árbol vivo yo junto a su raíz.

(SI ALGUNA VEZ EL HUECO DE UN ÁRBOL LES DIO MIEDO, IMAGINEN ENCIMA AHORA SABER QUE AHÍ VIVE DAVID.)

Soy un gnomo
y simplemente con mirar
todo lo que piensas tú
podré adivinar.

(OK NO HACE FALTA ACLARAR NADA, YA ES MUY OSCURO UN GNOMO QUE MANEJA LA MAGIA NEGRA) (¿SERÍA UNA FORMA DE INCULCARLES A LOS NIÑOS ESA SENSACIÓN DE QUE ESTÁN SIENDO VIGILADOS Y NO PUEDEN MANDARSE CAGADAS? ¿UNA VERSIÓN INFANTIL DEL GRAN HERMANO? ¡ESO QUE PENSÁS ES UN CRIMENTAL, PENDEJO!)

Soy 7 veces más fuerte que tú
muy veloz,
y siempre estoy de buen humor.

(GNOMO ENGREÍDO)

Soy un gnomo,
el más anciano del lugar,
uso hierbas que yo sé que pueden curar.

(APOLOGÍA A LAS DROGAS.)

Evitando a los enemigos,
a los trolls y a las mofetas,
con mi gorro y con mi zorro,
voy corriendo de aquí para allá,
ten cuidado no me pises
si es que estás cogiendo setas,
no sea que cometas una barbaridad.

(ESO ES DEMASIADO... ¿EVITANDO A LAS MOFETAS? ¿SI ES QUE ESTOY COGIENDO SETAS? ¿CON TU GORRO Y CON TU... ZORRO? ¡¿WTF?!)

Para el que la quiera escuchar, calate el principio tecno:
(No puedo creer que esté en goear)
http://www.goear.com/listen.php?v=1503c26

Maldita sensación térmica

Soy del tipo de personas que se ven afectadas por la temperatura. Sí, el típico cliché: en los días de lluvia resurgen mis monólogos existencialistas y en los días de sol suelo irradiar tanta energía que podría ser portada de un libro de autoayuda. Pero cuando se combinan el calor y la humedad me transformo en un monstruo de cabellos frizados, tolerancia cero y voluntad de grito constante.Así que ahora me replanteo toda la cuestión del calentamiento global, y así concluyo que tengan por favor a consideración (por el bien de nuestra salud mental) apagar el aire acondicionado si no se está utilizando e intenten reducir el consumo eléctrico. -Eso incluye tu máquina de hacer helados de MATTEL.-

Mamá, me enamoré del zapatero

Cuando era chica me encantaba el que trabajaba en la zapatería del barrio. Tanto que cada vez que se me rompía la mochila la llevaba a arreglar ahí, por más que resultara mucho más barato comprar otra. (Era de esas típicas de tela de mala calidad que si llevás más de 3 libros se te terminan cortando las tiras.) Me gustaba tanto que aún cuando nos mudamos y ya no quedaba tan cerca, seguía yendo, y me ofrecía a llevar lo que se rompiese.
Hasta hoy tenía ese recuerdo medio borrado, pero tuve que arreglar unos zapatos, y fui por costumbre allí. El chico seguía estando, aunque ahora no me pareció ni lindo ni simpático. Y así como vino se fue, mi amor por el zapatero.

Lunes

Qué placer mayor que el de dormir mientras llueve.

Pasión de Sábado

Una verdad de hoy: la plastilina entretiene.

Un tipo.
La clásica empanadita, con el repulge más
triste en la historia de las empanadas de
plastilina.

Attempt of knife.

Una pseudo criatura simpática.

Hey Popeye !

Siete de la mañana. Vuelvo de bailar con un antojo enorme de algo salado. Miro el menú del restaurante de la esquina y enseguida descarto la opción de un tostado: demasiado caro para mi gusto. Llego a casa, abro la heladera y la encuentro vacía, sólo quedan dos rodajas de pan, algunos huevos y medio paquete de espinacas en el freezer.

Así es que quince minutos más tarde estoy en la cama, con una bandeja en mi regazo y una tortilla de espinacas a medio comer...Alguno dirá: ¡Loca, hiciste cualquier verdura! Y yo tengo que responderle que no, que cualquiera no, que espinacas.

Into the wild

Saco la taza del microondas y me siento al sol. Tengo en mis manos birome y hoja en blanco, de esas de impresora que con la excusa del "está doblada" saqué del escritorio. No sé por qué pero me tienta más escribir en una hoja genuinamente en blanco y no en pedazos de papel que sobran, con sus renglones y accesorios molestos... Me dispongo a hundirme entre ideas cuando un "alejate de mi café con leche, puto", dirigido a un perro que no es mío corta el momento. Entonces tomo un sorbo y me doy cuenta que ya está frío y que tanta leche lo vuelve desagradable. Extraño el café apenas cortado, casi puro, que consumía en litros el año pasado. Ahora está prohibido: un estómago sensible o exceso de mi parte. Quién sabe si ambas... Aunque siendo sincera supongo que 5 tazas diarias era mucho.... De todas formas los bichos me dejaron sin opción: lo atacan las hormigas, lo lame el gato, ahora sí, no gracias.
Vuelvo sobre la hoja pero una mosca me distrae. Después pienso en la hormiga que está caminando por mi pierna y que sigue insistiendo, a pesar de que es la tercera vez que la saco. También me detengo en un asqueroso graznido y continuo aleteo que se oye cerca ¡Malditas sean las palomas, ratas inmundas, escoria urbana!
Concluyo que lo del verde inspirador es una mentira, que me concentro más en el "encierro", entre paredes, que logro focalizarme mejor adentro porque ahora el perro está oliendo las partes del gato y esta vez sí que no van a surgirme más ideas.

Cuestión de piel

En un especie de trabajo que tengo me mandaron a comprar Verrutopic, un producto que elimina las verrugas y agujerea los bolsillos. (¡38 pesos la caja! ¡Dios quiera que no me salga ninguna de esas asquerosidades en la piel!) En la primera farmacia a la que entro ocurre el siguiente hecho:
-Hola qué tal, te hago una pregunta: ¿Verrutopic tenés?
-No, de ese no me queda. Tengo Verruguín, si querés...
-No, gracias, necesito de la otra marca.
-Pero, ¿es para vos?
-No, me mandaron a comprarlo. ¿Sabés de alguna otra farmacia por acá?
-Sí, tres cuadras para la izquierda....Decime, ¿está crecida?
-¿Qué cosa?
-La verruga...Porque si no cambia de tamaño, yo me las dejo. Mirá.-Acto seguido se levanta la remera y me muestra una verruga en su costilla. Y yo, intentando disimular mi sorpresa y repulsión doy algunos pasos hacia atrás, sólo pensando en salir de ahí y le digo:
-Es que igual necesito comprarla, gracias.
En la calle me permito la carcajada. Mientras camino hacia la otra farmacia me pregunto: ¿qué carajo acaba de pasar?

Primera Confesión

Qué puedo haber hecho de productivo de mi vida hoy si el día llegó a su punto cúlmine y subieron mis niveles de adrenalina cuando encontré un bloque de plastilina sin abrir y sin usar...